Este encantador hotel de playa, dirigido por una familia, fue renovado en 2011 y es un verdadero y exclusivo refugio para unas vacaciones, con un fuerte espíritu medioambiental. A pesar de estar alejado del ruido del tráfico y la actividad de la ciudad, queda a solo 20 minutos a pie del centro de la pequeña ciudad, donde se ofrecen pintorescas cafeterías y tabernas. Este hotel garantiza una estancia tranquila y relajada, cerca de la naturaleza, y consta de un total de 75 habitaciones, que incluyen 1 Junior suite. Las instalaciones de este establecimiento climatizado incluyen vestíbulo con servicio de salida y recepción 24 horas, caja fuerte, servicio de cambio de divisas y sala de TV. Los más pequeños pueden divertirse en el parque infantil y hay una cafetería, bar y restaurante. Los huéspedes apreciarán las instalaciones para conferencias y la conexión a Internet WiFi (de pago). También pueden hacer uso de los servicios de habitaciones y de lavandería (ambos, de pago). Además, hay aparcamiento para los huéspedes que lleguen en coche y se pueden alquilar bicicletas en el recinto (por un cargo extra).